La Luna en Leo
A veces me pregunto cómo sentirá el nativo que tiene la Luna en el signo de Leo.
Todos tenemos La Luna en un signo y cada uno sabe como la vive o la siente…al menos eso pienso. Cuando pienso cómo se vivenciará a la madre, cuando la Luna está en Leo, tengo la imagen de una reina con sus súbditos, que serían sus hijos.
¿Cómo se sentirá el nativo respecto de su madre? ¿qué vivenciará?, porque no significa que la madre sea leonina, pero la vivencia del hijo/a lo es.
Medito sobre este emplazamiento y veo al hijo/a ciertamente triste, la madre es inalcanzable, maneja el reino con destreza, pero a veces se olvida de bajar la mirada y acariciar las cabezas de sus retoños. Una madre con un brillo particular sea por su inteligencia, su profesión, popularidad o porque es fascinante. Quizás lo sea para el mundo, aunque para sus hijos sea inalcanzable.
Inalcanzable es el término que elijo para describir la necesidad del nativo. La mamá que está en casa, que escucha, que le da de comer, pero el nativo nunca logra llegar a esa emocionalidad impactante y quizás ciertamente fría.
Leo es un signo apasionado, al igual que la casa V a la que representa, pero no significa emotivamente cálido. Por lo tanto, la relación con la madre no solo es inalcanzable porque con dos palabras la reina los despacha, sino que el calor amoroso no lo recibirá nunca.
Y ¿cómo será el nativo con la luna en leo? Creo que tratará de compensar la falta de mamá que arrulla a sus hijos, con la necesidad de ser siempre el centro. Que sus necesidades sean el centro en una relación, trabajo, amistad, etc. De la misma manera su emocionalidad tendrá que ser la preocupación y el desvelo de los que rodeen al nativo.
Si tengo que hablar de la generosidad de Leo, particularmente me encuentro en un
problema. Son personas generosas, pero a veces esa virtud responde a la
necesidad de hacerse notar, quizás no quieran ser generosos del todo, pero al
tener ese gesto trasciende hacia los demás. Por lo tanto, pienso que la Luna en
Leo juega, el nativo juega un poco con su emocionalidad, que sea un poco
espectacular y atraiga la
atención de los demás, no está tan mal.
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